Durante el siglo XX los vehículos pasaron de ser jalados por animales a tener motores de combustión. El cambio provocó el consumo planetario de gasolina y de otros derivados del petróleo, así como la propagación de carreteras y el aumento de la contaminación ambiental.
Ahora con los efectos del cambio climático, la contaminación atmosférica y el calentamiento global, los investigadores buscan alternativas para el transporte. El objetivo es adoptar alternativas limpias pero ágiles en la movilización de personas y productos.
Descargue: Transporte limpio.
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